Cuando Viviana adoptó a Brisa, no se imaginaba hasta qué punto podía ser cariñosa, además de muy buena y juguetona.
Y lista, muy lista. Cuando Viviana tiene turno de noche, Brisa se desliza en su cama para dormir al lado de su marido, que está loquito con ella. Es una auténtica pillina!!
A Bruno, su otro gato lo tiene frito ,pero se pasan el día jugando entre ellos, haciéndose mimos y se hacen muchísima compañía el uno al otro. Nunca nos cansaremos de decir que es mejor dos que uno sólo.
Viviana nos cuenta que está muy feliz con ella, que no se puede pedir más y que Brisa está muy feliz en su hogar..... y también nos dice que os transmitamos a todos que os animéis a dar un hogar a tantos animales que tenemos en adopción, que se convierten en compañeros de vida ( así solemos llamarles nosotras) y alegrías.
Muchísimas gracias ,Viviana , por dar esta oportunidad tanto a Bruno en un principio como a Brisa después!!
