A veces la vida te pone a prueba haciéndote pasar por momentos muy dolorosos. Eso fue lo que les sucedió a Ana y Adrián. A pesar de ello, decidieron llenar de alegría su día a día .
Enseguida contactaron con nosotras y tras concertar una cita, vinieron a conocer a nuestros pequeños.
Justo cuándo llegaron, acabábamos de recoger a Zoe y a sus hermanitos, una camada cruce de dálmata.
Conocieron a los cinco primeros que llegaron y volvieron cuando pudimos recoger al resto de hermanos.
En esa segunda visita, vieron a una atrevida Zoe que salía la primera por delante de sus hermanos y se sentaba delante de ellos, confiando en que su destino ya estaría escrito.
Como podréis imaginar, en ese preciso momento surgió la chispa que les llevó a decidir que Zoe era el nuevo miembro de su familia!!!
Sabemos que Zoe llegó a vosotros en un momento muy difícil, quizá para hacer más llevadero ese duro trance y confiamos en que así sea.
La vida con un compañero de cuatro patas se hace mucho más llevadera y alegre, ellos saben curar nuestras penas!!
Muchísimas gracias, chicos por haber sacado fuerza de dónde no la había para dar un paso tan importante y por haber dado una nueva y mejor vida a nuestra pequeña, que ya es vuestra!
