En casa de Rubén ya tenían una gatita, Arya y llevaban tiempo pensando en adoptar otro gatito para que se pudieran divertir juntos.
En Junio vieron a nuestro pequeño en la web, su historia les conmovió y se de decidieron a dar el paso.
Desde el principio, ambos gatetes hicieron muy buenas migas, se aceptaron sin ningún problema. Una vez más, queda demostrado que es muy beneficioso tenerlos a pares!
El pequeño mimoso no se separa de su familia humana, es muy cariñoso y juguetón y le encanta que le hagan mimos a todas horas.
Muchísimas gracias familia, por darle la oportunidad de integrarse en un hogar lleno de cariño, por darle la posibilidad de pasar su vida en una casa calentita y lejos del sufrimiento que supone
una vida en la calle!!!!
